Senderismo, algo más que un deporte
El senderismo, por la fuerte implantación en la sociedad, tiene incidencia en bastantes aspectos no deportivos.
Implicación en la economía
Se estima que las cifras de los practicantes del senderismo en los grandes países europeos son : 40 millones en Alemania, 6,6 millones en Holanda, 15 millones en Francia y 15 millones en Inglaterra . En España son 4 millones los practicantes de este deporte, algo menos del 10% de la población. En el mundo federado solo un 1% no hace senderismo, mientras que para el 53% es la práctica exclusiva o preferente. Su práctica, dentro del fenómeno del turismo, sobre todo el territorio y en cualquier época del año. Tiene un evidente impacto económico de especial valor ya que se produce, sobre todo, en el medio rural.
Sensibilización medioambiental
No hay mejor manera de valorar, y de defender, el patrimonio medioambiental que conocerlo “a pie”. El tránsito de senderistas por los Espacios Naturales Protegidos y otras partes del territorio de especial valor medioambiental genera una relación empática entre las personas y la naturaleza, convirtiéndose estos en unos potenciales defensores de los valores de los segundos.
Recuperación de un patrimonio histórico
El senderismo es el “uso propio” que permite rehabilitar la red de caminos tradicionales, que conforma un patrimonio testigo de nuestra historia y nuestra cultura. Calzadas romanas, cabañeras y cañadas, caminos mineros, itinerarios religiosos, vías de comunicación entre pueblos, etc. pueden recobrar su sentido con este uso deportivo.
Reivindicación de la vida rural
La acelerada urbanización de la segunda mitad del siglo XX en España ha cargado de connotaciones negativas a la vida rural, cuestión que hoy no se corresponde con la realidad dado el aumento de servicios de los que hoy está dotado este.
Salud
Andar es la acción física básica del ser humano. Y se ha convertido en la rutina privilegiada en la prevención de muchas enfermedades derivadas del sedentarismo, tanto para los niños como para los adultos.