Alimentación e hidratación

Caminar  a paso rápido supone un gasto suplementario de 270 kcal. a la hora respecto  a estar sentado. Y no todos los alimentos son los mas adecuados, pero aquí entran los gustos. Las recomendaciones generales son:

• agua u otros líquidos; hay que llevar 1,5 litros por persona y día, como mínimo; este “peso” puede ser evitado  si conocer los puntos seguros de abastecimiento de agua del recorrido, pero es más seguro portearla; los senderistas experimentados beben pequeñas cantidades cada 15-20 minutos.
• durante la caminata no ingerir alimentos que supongan una digestión pesada, que restará energía para el esfuerzo.
• es conveniente complementar la alimentación habitual con elementos energéticos.
• al finalizar la actividad, se recomienda  comer pasta y reponer los líquidos perdidos.

En caso de actividad en invierno o en ambientes muy fríos, conviene  tomar bebidas calientes  o sopas, conservados en recipientes especiales.

En caso de actividad en verano o en ambientes muy cálidos, conviene madrugar y cargar con mucha mas agua.